Prólogo El Espíritu Eterno

Elena Jiménez es una mis profesoras en la facultad en la que estudio, ella me imparte la asignatura de Técnicas de comunicación oral y escrita, me sorprendió gratamente el hecho de que nos asignaran una sustituta de tanto calibre ya que es una persona muy preparada, debido a que es doctora en lingüística computacional, trabaja en la Universidad Virtual UVILCE siendo ella misma la editora de la revista filológica Esfera además de blogger de La piel del alma (http://elenapjimenez.blogspot.com) y colaboradora en otras publicaciones, además es hispanista reconocida por el instituto Cervantes.
El libro comienza de forma impactante en su primera frase, «sabe a sangre» lo que me llevo a continuar mi lectura de forma asidua, hasta que finalice el libro. Tardé tres días. De principio a fin es un libro que te absorbe, a pesar de que por momentos la lectura se hace complicada, porque utiliza una literatura muy compleja, aparecen muchos términos que desconocía y el vocabulario es muy extenso y poco usual, incluso nos aparecen frases en latín. La novela transcurre en los años 40 cuando ha finalizado la guerra civil en España, nos cuenta la historia de Marina Mun una joven malagueña, pelirroja, guapa y muy enérgica, que embelesa a todo el que tiene a su alrededor, se encuentra viviendo en Francia por motivos que se van descubriendo a medida que avanza la lectura. Tiene como amigos a Pablo Picasso, Manuel de Falla, Federico García Lorca, Miguel Hernández, Antonio Machado… Por circunstancias de la vida Erich Kennen un militar alemán de éxito, al que de forma fortuita le llegan a sus manos unos documentos guardados celosamente a lo largo de la Historia de la Humanidad (el Evangelio original de María Magdalena, el diario del prior de la orden de Calatrava en la Batalla de las Navas de Tolosa, la última carta del diario de Leonardo Da Vinci y el diario de la Condesa de Báhory) se obsesiona con ella de forma inexplicable. De ahí para adelante todo serán aventuras y desventuras, con diversos personajes que no por ser secundarios poseen menos importancia. Y uno en especial, que a pesar de que no mediar palabra tiene un gran peso en esta novela, Pancho, su fiel perro Labrador.
Quisiera recomendar este libro a todas aquellas persona amantes de la lectura, es una novela apasionante, intrigante, amena, con toques de fantasía y al mismo tiempo realista y dura porque nos descubre parte de nuestra historia pasada.